Cada tanto recibo mensajes

Cada tanto recibo mensajes de contenido racista o clasista, con burlas y ataques a nuestro pueblo y a sus dirigentes mejores, provenientes de algunos buenos compañeros.

Con demasiada prisa y con enojo sincero, retransmiten esos paquetitos de basura injuriosa que atiza odios y prejuicios, y explican que es "para ponerte en conocimiento de lo que hacen nuestros enemigos".

Yo prefiero no difundir sus infamias, que producen en esos formatos para ser difundidas entre los suyos para generar crispación; entre nosotros para que se reimpulsen por nuestra indignación; y entre neutrales, ingenuos e incautos para sembrar cizaña.

Para saber de la moral y la ética política del gorilismo extranjerizante, autoritario y clasista, no necesito de esas pruebas e insumos, como tampoco para conocer la catadura de sus voceros y dirigentes.

Si no es para contrarrestar sus operaciones de acción psicológica no veo sentido en difundirlas.

Más implacable que cualquier Deidad Maléfica resultan la Indiferencia del Mundo y el Olvido, dijo el poeta.